El cariño del alumnado de Canarias llega a los refugiados en Lesvos, con la entrega de unos regalos que simbolizan la empatía y solidaridad de todos. Desde algunos centros educativos que participaron el curso pasado en el proyecto educativo “Paz En Construcción”, a través de la convocatoria de la Dirección General de Ordenación, Innovación y Promoción Educativa de la Consejeria de Educación del Gobierno de Canarias; hicieron entrega de algunos detalles que deseaban fuesen entregados en algún país en guerra o transito de refugiados en su nombre. Desde octubre el proyecto recorre la Europa de la crisis migratoria, donde muchas personas buscan refugio, llegando hasta la isla griega de Lesvos donde hay mas de 7.000 refugiados atrapados. Aquí esta Pikpa Camp, un centro gestionado por la organización Lesvos Solidarity - Pikpa, que hace una gran labor con las personas que necesitan una atención especial por su vulnerabilidad. Un lugar ideal para que Lara Lussón, voluntaria de PROEM - AID, hiciera entrega de estos sencillos detalles, pero cargados de afecto.
Del IES Blas Cabrera Felipe de Arrecife en Lanzarote, se hizo entrega de unos jabones realizados de forma artesanal por el alumnado del FP a Fátima, una mujer siria que espera con su hijo Mohammad ser deportados a Turquía, tras ser denegada por segunda vez su petición de asilo, cuando paradójicamente a su hija sí se lo concedieron y está en Alemania. Bajo el mismo criterio de personas que huyeron de una país en guerra, no se entiende esta resolución que causa la angustia en esta mujer de más de sesenta años y su hijo, por culpa del tratado entre la Unión Europea y Turquía que vulnera la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de Naciones Unidas de 1951.
El alumnado del CEIP Frenado León y Castillo de Telde en GranCanaria, tenía gran ilusión de que su perro de peluche llegase a algún campo de refugiados para que jugasen con el, pero pensamos que sería mejor fuese directamente a las manos de la pequeña Naze (3) y formase parte de los juegos que comparte con sus hermanas Gin (11), que quiere ser doctora, y Darin (9), que espera ser abogada. Naze por ahora solo piensa en ser niña y jugar, ahora con una gran sonrisa al recibir este regalo gracias a otros niños como ella y con la atención diaria del equipo de voluntarios de Lesvos Solidarity, que trabajan para ayudarles a olvidar un poco todo lo sufrido hasta ahora en sus cortas vidas, tras una peligrosa travesía por el mar desde Turquía buscando un presente seguro y un futuro mejor, pues en su país continúa la guerra y no quieren morir. Esa es la razón por la que esta familia emprendión su huida, estoy seguro que tu harías los mismo.